Las varices son una de las dolencias más frecuentes que se da en 1 de cada 10 personas aproximadamente, generalmente mujeres.
Ciertas circunstancias como los embarazos, la obesidad o algunas predisposiciones congénitas, pueden hacer que las válvulas se ensanchen y se debiliten provocando problemas de circulación sanguínea.
Las varices se clasifican de varias maneras, según su tamaño, visibilidad o parte del cuerpo en la que se encuentren ubicadas.
Telangiectasias
Las telangiectasias son las clásicas arañas vasculares, superficiales y de pequeño tamaño, de 0.1 a 1 mm. Se presentan con distinta coloración, pero suelen ser rojas de distinto tono. Las más gruesas pueden adquirir una tonalidad más oscura.
Varices reticulares
Se sitúan un poco más profundas que las telangiectasias, en la dermis reticular. Por transparencia adquieren un color azulado-verdoso, y el tamaño puede ir hasta los 3-4 mm. Cuando se dilatan, lo hacen como en trozos en forma de zig-zag.
También se consideran varices estéticas y superficiales aunque, en determinadas ocasiones, pueden producir sensación de pesadez y cansancio en las piernas.
Tratamiento de microescleroterapia
Las varices reticulares (varices pequeñas) y telangiectasias pueden eliminarse mediante microescleroterapia, uno de los tratamientos más comunes para las varices de piernas, cara y manos.
El tratamiento consiste en una serie de microinyecciones con una suave solución química (sustancia esclerosante) en la vena afectada que irrita el revestimiento interior y hace que ésta se cierre. Una vez que la vena ha sido esclerosada, es reabsorbida por los mecanismos naturales del propio organismo.
Finalmente, desaparecen después de unas semanas y con ella, el dolor. Esta técnica elimina las dilataciones vasculares superficiales que tanto afean las piernas.
El número de sesiones necesarias varía según cada paciente, el número de venas, el tiempo de evolución y el nivel de perfección estético deseado.
Antes de plantearnos eliminarlas, conviene que consulte con el especialista en flebología para que haga un reconocimiento y realice el tratamiento más adecuado.
Dra. Maria Antònia Bonany
Médica. Flebóloga.
Centro de Enfermedades de Venas
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Figueres (Girona)
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