¿Es posible eliminar las varices sin cirugía?

Las varices son el trastorno venoso más frecuente en el ser humano. Su aparición se produce a causa de las dilataciones de las venas de las piernas, bien por la debilidad de sus paredes o por problemas en las válvulas.

En la mayoría de las ocasiones se consideran como un simple trastorno estético, aunque también pueden llegar a ser un problema grave para la salud. En cualquier caso, su eliminación mediante cirugía deja huella, además de producir dolor y la visión de cicatrices.

Tipos de varices

Las enfermedades de las venas se clasifican en función de su tamaño (diámetro del vaso afectado), distribución y origen. Distinguimos varios tipos de varices:

Las enfermedades de las venas se clasifican en función de su tamaño (diámetro del vaso afectado), distribución y origen. Distinguimos varios tipos de varices:

  • telangiectasias o arañas vasculares,
  • varículas,
  • varices reticulares,
  • varices colaterales y
  • varices tronculares.

Escleroterapia con espuma

Actualmente disponemos de una técnica estrella para eliminar las varices sin cirugía: la esclerosis con espuma.

La escleroterapia con espuma es un tratamiento mínimamente invasivo para eliminar el efecto antiestético de las varices sin necesidad de pasar por el quirófano.

Antes iniciar el tratamiento, el médico realiza un diagnóstico para determinar el tipo de varices a tratar.

El tratamiento se lleva a cabo mediante la inyección de un producto esclerosarte en forma de espuma que ayuda a obtener un mayor contacto con el interior de las paredes de las venas, alargando así el tiempo de contacto y el aumento de su potencia. Esto permite utilizar una menor cantidad de fármaco.

Gracias a esta técnica, la paciente puede incorporarse a su vida diaria sin necesidad de baja médica.

En definitiva, cabe recordar que las enfermedades venosas son cada vez más prevalentes, ya que su aparición aumenta a medida que pasa los años. Este factor, junto con el mejor conocimiento de la fisiopatología y los adelantos en su tratamiento, hace que cada vez se tenga más conciencia que éste también es un problema de salud importante.

Por este motivo, es importante consultar a un médico especializado en flebología para que nos indique cuál es el tratamiento más adecuado en cada caso.

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