La llegada del buen tiempo es una excelente oportunidad para disfrutar de los beneficios naturales que el agua fría puede ofrecer, especialmente para las personas que padecen de varices. La frescura del agua del mar, la piscina o incluso una ducha en casa, puede convertirse en una de las mejores soluciones naturales y efectivas para aliviar los síntomas de las varices.

¿Por qué es beneficiosa el agua fría para aliviar los síntomas de las varices?

Vasoconstricción y mejora de la Circulación

La exposición al agua fría provoca la vasoconstricción, es decir, la contracción de los vasos sanguíneos. Este efecto contribuye a enviar la sangre de vuelta al corazón más rápidamente, aliviando la pesadez y la hinchazón que suelen acompañar a las varices.

Efecto de Bombeo y reducción de la Inflamación

Además, el agua fría produce un efecto de bombeo al alternar fases de vasoconstricción y vasodilatación, favoreciendo así la circulación sanguínea. Este efecto, sumado a su capacidad para reducir la inflamación, facilita la circulación y alivia los síntomas de las varices.

¿Cómo aprovechar el agua fría para las varices?

Natación y caminata acuática

Nadar o caminar en la orilla del mar son actividades de bajo impacto que ayudan a incrementar la circulación sanguínea en las piernas.

Duchas y baños de pies

Las duchas y los baños de pies fríos son alternativas accesibles y efectivas. Dirige el agua especialmente a tus piernas para aprovechar la frescura y aliviar la pesadez y el dolor.

La clave es recordar que el agua fría para las varices puede ser una estrategia útil para aliviar los síntomas de forma natural, aunque no reemplaza el consejo o tratamiento médico. Si tus síntomas persisten o empeoran, es importante que consultes a un especialista en el tratamiento de varices en Figueres. Pide cita en la consulta de la Dra. Bonany.