El verano es una de las estaciones más esperadas del año. Aún así, para las personas que sufren de Insuficiencia Venosa Crónica es la más temida, ya que el calor provoca un agravamiento de las molestias de las varices y pesadez en las piernas. Por este motivo, es importante adquirir buenos hábitos para mejorar la circulación venosa, especialmente en verano.

 

¿Qué es la insuficiencia venosa crónica?

 

La Insuficiencia Venosa Crónica (IVC) es una enfermedad crónica que indica una disfunción en el sistema venoso de las piernas y extremidades inferiores. Aunque se trata de una enfermedad benigna y tratable, es importante tomar medidas para aliviar sus síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes.

 

¿Cómo mejorar la circulación venosa en verano?

 

Ahora que estamos en verano, la circulación venosa se hace más difícil debido a las altas temperaturas. Para contrarrestar sus síntomas y favorecer la circulación sanguínea en las piernas, puedes incorporar las siguientes recomendaciones a tus hábitos estivales para ayudar el retorno de la sangre de las piernas hacia el corazón:

  • Haz ejercicio todos los días para mantener las piernas activas. Si te gusta caminar, pasea como mínimo durante media hora al día. Es una actividad de bajo impacto, pero muy efectiva para favorecer el retorno venoso, mejorar las articulaciones y mantener un peso saludable.
  • Evita estar mucho tiempo sentado o de pie. Un aspecto muy característico que comparten profesionales que trabajan de pie o sentados durante mucho tiempo es que sufren de piernas cansadas. Si es tu caso, puedes evitarlo realizando ejercicios entre horas, como ponerte de pie cada 15 o 30 minutos, rotar los tobillos, evitar cruzar las piernas, o hacer estiramientos de brazos, cuello y tronco para evitar la rigidez muscular.
  • Las cremas específicas para piernas cansadas también ayudan a aliviar la sensación de cansancio y las molestias de pesadez de forma inmediata. Aplica la crema realizando un masaje con movimientos circulares desde los tobillos hasta llegar al muslo de forma progresiva. Además de evitar la acumulación de líquidos en la zona, mejorarás la circulación venosa.
  • En cuanto a las recomendaciones alimentarias, es esencial evitar los alimentos fritos, los dulces, el alcohol y la sal. En la medida de lo posible, mantén una dieta rica en fibras con verduras, frutas, legumbres…y evita las grasas saturadas como la mantequilla y la carne roja.
 

Adquirir buenos hábitos para mejorar la circulación venosa en verano es esencial, pero también es fundamental cuidar las venas durante todo el año es para prevenir la aparición de varices y las molestias asociadas.