Si bien la diabetes no es una causa directa en la aparición de varices, si puede afectar a la salud circulatoria y contribuir al empeoramiento de las varices u otras afecciones venosas de las personas que la padecen.

En primer lugar, la diabetes puede debilitar las paredes de las venas, haciéndolas más susceptibles de sufrir daños. Este daño dificulta la circulación de la sangre y puede acabar provocando un estancamiento e hinchazón en las piernas. Es decir, la incapacidad del retorno venoso que va de las piernas hacia corazón, puede hacer que la sangre se acumule más fácilmente en las venas y hacer que se agranden.

Síntomas de mala circulación sanguínea en diabéticos

La mala circulación es un síntoma generalizado de la diabetes, y suele manifestarse en las piernas, los pies y las manos. Otros signos reveladores de que una persona tiene mala circulación sanguínea son las varices, los calambres, la sensación de picor en las zonas afectadas, el entumecimiento de las extremidades y la dificultad al caminar.

Causas de la aparición de varices en personas con diabetes

La aparición de varices en personas diabéticas puede estar causada por factores hereditarios, el sendentarismo, los cambios hormonales, la obesidad o el tabaquismo.

Consejos de prevención

Si tienes diabetes y eres propenso a las varices, es fundamental que hagas todo lo posible por reducir el riesgo. Los cambios en el estilo de vida como mantener un peso saludable, comer alimentos ricos en fibra y evitar los alimentos ricos en sodio, te ayudarán a reducir el riesgo de la aparición de varices. Además, hacer ejercicio con regularidad, apoyar las piernas cuando se descansa y no estar sentado o de pie durante mucho tiempo favorecerá la circulación sanguínea.

Si estas medidas no son suficientes, visita a un médico especializado en flebología para que pueda recomendarte tratamientos adicionales como la terapia de compresión o la escleroterapia con espuma. Con un control adecuado, podrás minimizar el impacto tanto de la diabetes como de las varices y mejorar tu calidad de vida.